Desde lejos te escucho respirar.
¿Que tan lejos? me preguntan.... Donde no se ve el mar.
Lluvia que baña mis costas, desde lejos te puedo ver llegar.
¿ Traerás en tus gotas aquello que espero?
El también te siente, desde algún punto de ésta, mi ciudad.
¿ Seguirás aquí cuando despierte?
Ya desde adentro, de cerca, te puedo sentir acariciándome la cara.
Las paredes me dejan oírte, las puertas se abren para dejarte pasar.
Pase muchas noches imaginando esta noche, pero ya no es de noche...
Melisa Roberts
se puede hacer un verso desde el hueso, con un simple: Te quiero.
ResponderEliminarPato.